
Las turbulencias en las relaciones bilaterales entre México y Estados Unidos, que iniciaron con la llegada de Trump a su segunda administración, no dan tregua: en medio de la suspensión de los anunciados aranceles del 25% en contra de todo tipo de productos mexicanos y canadienses, se dio a conocer la intención de establecer el mismo gravamen a todas las importaciones estadounidenses de acero y aluminio; una medida con especial impacto para América del Norte, al sumar Canadá y México alrededor del 40% del total de las exportaciones de dichos metales. Si bien la medida encuadra en la retórica usual […]


